Ambiente
Se llevó a cabo la segunda jornada de plantación de árboles frutales nativos para celebrar la biodiversidad y la memoria alimentaria
En el marco de la revalorización de árboles frutales nativos, llevada adelante entre la Municipalidad de Gualeguaychú y la Facultad de Bromatología, se llevó a cabo la segunda jornada de plantación en el predio ubicado en el Polo Educativo.
El 21 de noviembre pasado, tuvo lugar la segunda jornada de plantación de árboles frutales nativos e intercambio de aprendizaje compartidos, iniciativa que promueve la conservación y el valor cultural de estas especies autóctonas, de gran importancia para la identidad y la sostenibilidad de la región.
La actividad contó con la participación de estudiantes, directivos, docentes y personal no docente de la Facultad de Bromatología de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), así como de personal del Vivero Municipal de Árboles Nativos dependiente de la Dirección de Espacios Verdes y del Centro de Interpretación del Patrimonio Natural “La Delfina” que depende de la Dirección de Áreas Naturales Protegidas de la Subsecretaría de Ambiente y Seguridad Alimentaria.
El decano de la Facultad de Bromatología Gustavo Isaack, junto a la vicedecana María Tulia Aizaga y la docente de la cátedra Problemática Nutricional de la Licenciatura en Nutrición, Magister María Clara Melchiori, coordinadora del proyecto de Innovación e Incentivo a la Docencia: “Los árboles frutales, testigos de la memoria alimentaria del pueblo”, agradecieron la iniciativa, y dieron comienzo a la actividad donde se plantaron 5 especies de árboles frutales nativos como pitanga, ingá, algarrobo y 2 guayabos, a las que se sumó un árbol de mandarina.
Primera jornada
Esta actividad complementa la primera jornada, llevada a cabo el 12 de noviembre pasado en el predio del Centro de Interpretación del Patrimonio Natural “La Delfina” en el Parque Unzué.
La misma consistió en una experiencia integral que combinó educación, arte y gastronomía, con disertaciones, plantación comunitaria de frutales nativos como pitangas, guayabas, ubajays y talas (junto a los tradicionales frutales como mandarinos, limoneros y manzanos), pintura y elaboración de un collage participativo sobre un cuadro pintado por Gladys Zagert, y degustación de preparaciones elaboradas con harinas y frutos nativos además de las frutas de estación a cargo de ACELA ER y la becaria doctoral Nancy Espósito, con alimentos como pitanga, mburucuyá, algarrobas, además de moras, nísperos, y limones, ofreciendo preparaciones sin TACC.
Estas iniciativas, que continuarán el próximo año, buscan reforzar la conexión entre la comunidad y los árboles frutales nativos, esenciales para la biodiversidad y la memoria alimentaria, fomentando un modelo de desarrollo sostenible que integre cultura, naturaleza y educación.