La Secretaría de Inversiones y Desarrollo Local ha desarrollado un enorme trabajo desde el inicio de la gestión para atraer el interés de empresas y desarrollos de diferente tipo a la ciudad. Esta tarea -desde un área única en los municipios de la provincia- ya ha rendido sus frutos y apuesta a crecer exponencialmente en el futuro.
En ese marco, su titular Estela Miño, explicó que “ya hay proyectos que se transformaron en realidad y otros que están en etapa de conseguir el financiamiento. Hemos venido trabajando codo a codo con industriales e inversores en dos caminos: uno, en una política de atracción de nuevas inversiones a la ciudad. En este sentido, la demora en sancionarse la Ley Bases, contenedora del RIGI (Régimen Integral de Grandes Inversiones) que se produjo recién en el mes de agosto pasado; y consecuentemente la demora en la adhesión de la Provincia de Entre Ríos al mismo (que se produjo el 8 de noviembre pasado), hicieron que faltase un elemento esencial para la búsqueda de grandes inversiones como es garantizar la seguridad jurídica. Si hablamos de beneficios impositivos por 15, 20 años, debe estar el marco legal vigente que los otorgue”.
“Tanto las embajadas consultadas oportunamente como posibles inversores en el país, estuvieron esperando durante prácticamente todo el año el marco jurídico e impositivo que las beneficiara y le diera estabilidad a largo plazo. Acontecido eso, proyectamos para 2025, aunque falte reglamentarse la Ley Provincial que adhiere al RIGI y crea el RINI en Entre Ríos (Régimen Integral Nuevas Inversiones), avanzar en una política más amplia incluyendo embajadas extranjeras en nuestro país, y buscando atracción de inversores externos”, agregó.
El segundo eje de trabajo fue la búsqueda en Gualeguaychú: “Paralelamente al tiempo de demora parlamentario antes planteado, se trabajó firmemente en estimular la inversión de capital local. Un dato muy importante que nos da la realidad es qué, así como desde aquí buscamos atraer inversiones y nuevas radicaciones industriales, desde otras ciudades y provincias acontece lo mismo. Una gran empresa del PIG estuvo muy próxima a ser atraída por una gran ciudad, dónde ya había adquirido parcela y proyectaba construir su planta industrial para radicarse allí. Actualmente, y con el cambio de paradigma desde la gestión municipal (que promueve la inversión privada que genere puestos genuinos de trabajo) ese traslado no solo se suspendió, sino que se ya ha puesto en venta el inmueble aquella ciudad”.
Otro dato de la realidad es que el blanqueo de capitales fue de un volumen inesperado hasta para quienes lo diseñaron. El haber exigido el depósito físico de la moneda extranjera ha hecho entrar al mercado financiero más de 20 mil millones de dólares. De este modo, muchos pequeños ahorristas prefieren disponer de su dinero para la inversión a mantenerlos como se dice vulgarmente "debajo del colchón" y que en la mayoría de los casos no ha sido por especulación sino por salvaguardar en algo el poder adquisitivo de sus ingresos contra la inflación. Se está generando poco a poco confianza, elemento indispensable a la hora de hacer una inversión a largo plazo.
Proyectos y realidades
La Secretaría de Inversiones y Desarrollo Local tiene en carpeta una treintena de proyectos donde se incluyen emprendimientos de diferente magnitud, algunos de ellos de enorme envergadura. Entre ellos se pueden nombrar un mercado mayorista; un hotel cinco estrellas; una fábrica de calefones y termotanques; empresas de tecnología; varias industrias del Parque Industrial que amplían sus plantas y otras que trasladan al PIG más líneas de producción; desarrollos inmobiliarios urbanos y centros comerciales; entre muchos otros.
“En estos ejemplos hay empresas que invertirán muchos millones de dólares, y muchos de ellos son capitales locales. En todos los casos, nuestra área hace de atractor en algunos de ellos y de facilitador en todos. Es una tarea integral que no se queda en convencer a alguien de las ventajas de la ciudad. Acompañamos, gestionamos y colaboramos en los distintos pasos para ampliaciones o radicaciones”, expresó Miño.
Por último, señaló que “algunos de esos proyectos ya salieron de la Secretaría y ya se pueden contar como nuevas inversiones. En definitiva, nuestra área, más allá de que contemple las direcciones de Producción y Vinculación Tecnológica con tareas más palpables y concretas, tiene mucho de trabajo en silencio, donde muchas veces acompañamos una inversión durante meses y no se ve hasta que no se pone el primer ladrillo. Pero es una labor diaria, perseverante y con enormes beneficios para la ciudad. En este primer año estamos más que satisfechos y sabemos que en 2025 será el año de las grandes concreciones”.